las movilizaciones en las universidades publicas ...
Aún recuerdo con alegría aquella tarde de noviembre en la que un número publicado en una cartelera nunca significo tanto para mí.
Yo, un estudiante de un pequeño colegio distrital había sido admitido en la mejor Universidad del País!!
Hasta este momento creía que solo era un privilegiado entre los miles que desean la misma oportunidad: no era consciente de que
En los pasillos de la universidad es común escuchar conversaciones sobre el estreno de la última película, el parcial de cálculo, la rumba del viernes o la práctica de química.
Seria genial que el día tuviera no 24 sino 48 horas para alcanzar a hacer tantas cosas.
Rara vez queda tiempo para sentarse a leer un periódico, y al igual que el resto del país, nuestro único contacto con la realidad nacional son los noticieros que escuchamos de fondo en medio del almuerzo o la cena.
Noticieros emitidos por los dos únicos canales privados, pertenecientes a los dos grandes grupos económicos de Colombia, por lo que sería demasiado ingenuo creer cien por ciento en su imparcialidad.
Aun así casi la totalidad de las personas aceptan como verdades absolutas lo que se emite por estos canales, sin siquiera cuestionar un poco su objetividad.
La consecuencia de esto es que asombrosamente Colombia es un país “derechizado” (uno de los pocos en la región) a pesar de tener uno de los niveles de pobreza y desigualdad más altos de Latinoamérica.
A través de RCN se ve un país próspero, en el que el gobierno pasado y el actual solo toman decisiones acertadas sobre el rumbo del país, decisiones que quien se atreva a cuestionar inmediatamente es estigmatizado y tildado con los peores adjetivos.
Pero nunca se ve la “otra Colombia” , aquella en la que la mayoría de las personas hacen milagros todos los días para mantener a sus familias con un salario mínimo, en la que miles de estudiantes que terminan el bachillerato salen a estrellarse con una realidad que les niega el derecho a la educación superior, pues las tarifas de las universidades privadas son impagables para la mayoría y los cupos en las universidades públicas son extremadamente escasos.
La televisión vende la idea de que en algún momento mágicamente y sin saber cómo, seremos ricos y podremos vivir como en las telenovelas. Pero esto es pura ficción, la realidad es que sin verdaderas posibilidades de educación superior y con una oferta salarial diseñada no para reconocer el esfuerzo de los trabajadores, sino para enriquecer a los empleadores, la mayoría de los colombianos estaremos siempre condenados a la pobreza.
Es el momento de despertar, de reaccionar, de tener una actitud crítica, de atrevernos a cuestionar las directrices que se nos imponen, como la actual reforma a la Ley 30. Este es un llamado no para promulgar y hacer propaganda a ideologías políticas, sino para reconocer nuestra obligación como estudiantes de la Universidad Pública de reflexionar y debatir los problemas del país, de reconocer nuestra obligación de representar y ser la voz de eso miles de jóvenes que no tuvieron la misma oportunidad que nosotros ... de ingresar a la educación superior publica Colmbiana.
By : estudiante de medicina de la U.N
No hay comentarios:
Publicar un comentario